Expertos en ocultar información

Expertos en ocultar información

Los de la 4T rezan como mantra que son diferentes, no les gusta que los comparen con sus antecesores, aunque cada día que pasa se parecen más a los panistas y priistas que tanto aborrece el inquilino de Palacio Nacional, quien pregona un falso humanismo.

Dice que no miente, no traiciona y no roba, aunque hay evidencia de lo contrario. Un rubro es la transparencia de la información y eso significa abrirla a las audiencias, no solamente vociferar dos horas en la mañanera discursos repetidos, como si eso fuera a volver un gobierno fracasado en uno exitoso por la fuerza de la repetición.

El hackeo por parte del grupo “Guacamaya” realizado a las Fuerzas Armadas en el que se extrajeron miles de documentos, algunos de seguridad nacional, pusieron sobre la mesa el estado de salud del presidente López Obrador. Claro que el equipo de comunicación y el mismo tabasqueño dicen que todo va bien, pero se tiene información de varias visitas al cardiólogo y otros especialistas.

La más importante fue un traslado de su finca en Chiapas al Hospital Militar en la Ciudad de México, el 2 de enero del año pasado. Luego de negarlo por semanas, a López Obrador no le quedó de otra que aceptarlo: «Es cierto que estoy enfermo, sufro varios padecimientos».

El sábado pasado la noticia de la muerte de Alejandro Gertz Manero corrió como reguero de pólvora por las redes sociales, pero las fuentes oficiales hicieron mutis. Tuvo que ser el periodista Joaquín López-Dóriga quien desmintiera la noticia. Afortunadamente todo fue una nota falsa, pero eso sucede porque no ha habido transparencia en el manejo de la información por parte de la Fiscalía General de la República.

La ausencia del fiscal, que comenzó a ser evidente, fue retomada por varios columnistas y tuvo que ser el presidente López Obrador quien dijera que se encontraba bien de salud y al frente de su encargo.

Pero la realidad de su salud sigue en la incertidumbre. Ha trascendido que se encuentra en un hospital de Estados Unidos desde el pasado diciembre, donde lo reportan como grave con cáncer terminal; ojalá no sea cierto.

Pero el asunto es la pasividad con la que se maneja la FGR y en general el gobierno de la 4T, que deja los cabos sueltos para que se hagan cualquier tipo de interpretaciones, de especulaciones y no desmiente ninguna. Cómo estará el asunto de complicado que Adán Augusto López, el súper secretario de López Obrador, ha tomado las riendas de la fiscalía.

Así, el estado de salud del fiscal general se ha mantenido en total hermetismo, como en el caso de López Obrador. Si no se hubiera dado a conocer la información por parte de columnistas, ellos no hubieran dicho absolutamente nada.

También lee: Adán Augusto sube y Sheinbaum nomás no levanta 

Eso sí, cuando eran oposición pedían saber sobre los padecimientos de Enrique Peña Nieto y el alcoholismo de Felipe Calderón. Hasta pedían sus renuncias y los que hoy son gobierno tenían razón, esa información debe ser de dominio público. ¿Qué pasó con aquello de que la vida pública debe ser más pública? O sólo para los otros… pero mejor ahí la dejamos.

Entre Palabras

¿Cómo va la Guardia Nacional y Claudia Sheinbaum? ¿Ya resolvieron los problemas de logística y mantenimiento? ¿O siguen persiguiendo peligrosos saboteadores? De nada sirve la GN en el Metro. Hubo otro incidente, ahora en la Línea 7.

Escríbeme tus comentarios al correo suartu@gmail.com y sígueme en la cuenta de Instagram en @arturosuarez_.

Hasta la próxima.