Un beso de despedida de Jay-Jay Johanson

Un beso de despedida de Jay-Jay Johanson

“Se está haciendo tarde, pero aun así tengo que esperar
para escuchar tus palabras susurrantes”
Jay-Jay Johanson/Whispering Words

 

Lanzado en el año 2000, con la fascinación por el trip hop de la ciudad de Bristol como temática principal, Poison, el tercer álbum del músico sueco Jay-Jay Johanson, despide a sus escuchas con un lindo baile en la oscuridad. Lejos de las canciones más ambiciosas del disco, como Believe In Us y Changed; Whispering Words es un melancólico vals con el que este evanescente artista vuelve a la penumbra de su ático y a su soledad.

Es sólo que la voz de este sueco, que tiene en su espina dorsal muy marcado el jazz de Thelonius Monk, conjura esa gélida sensación de desesperación, alienación y pesimismo; inmovilidad, en una palabra, pero al mismo tiempo es como si esa abyección no fuera demasiado, como para no soportarla. Es un dulce tormento.

Quizá para algunos es una balada intrascendente en un gran álbum de este crooner, pero es como una correcta despedida, pues tras endilgarnos el lento desarrollo de temas como Alone Again, u otros, en donde el artista juega con los ritmos y hace del trip hop su patio de juegos estilístico en turno, Whispering Words hace honor a su nombre y nos susurra en el oído, olvidando lo intrincado y ambicioso del álbum. Nos dice adiós con un beso.

En qué medida y en qué cantidad Poison fue inspirado por el ya legendario Dummy (1994) de Portishead, no es cuantificable, su combinación de la elegancia clásica de los años veinte es consistente con los ritmos electrónicos modernos, como hizo en el posterior Antenna (2003). De hecho, en el vigésimo aniversario del disco, Jay-Jay confesó ante sus fans en Facebook que el dueto que más desea en su vida es uno con Beth Gibbons, la hoy mítica vocalista de Portishead. Si alguien duda de la devoción que le tiene Johanson a Portishead, sólo tiene que escuchar Poison.

Whispering Words sería sin duda la versión que Jay-Jay, con su voz preciosista y glacial, podría realizar del espíritu oscuro y sofisticado de ese álbum impar que es Dummy.

Portada de Poison, el disco más vendido en la prolífica trayectoria de Jay-Jay
Portada de Poison, el disco más vendido en la prolífica trayectoria de Jay-Jay

Whispering Words posee el porte de una retorcida cinta de cine negro, el trip-hop con sus percusiones cual cama sónica perfecta, que insinúa obsesión, ensimismamiento. Luego los arreglos dotándole de una belleza sin futuro, como una noche estrellada y enigmática. Porque parece una versión aviesa del baile más cursi que se imagina un enamorado platónico con su amada.

Es teatro en el sentido más musical, con Jay-Jay haciendo lo suyo, dotar a su voz de pausas, saber cómo ir relatando el tema, haciendo que cada palabra nos importe y nos duela, una melancolía y parsimonia que va tan bien con ese motif, esculpido en música; como un bajorrelieve, con el bajeo poderoso pero sutil y un alma dolida y atrapada que nos hipnotiza.

Ahora tengo el coraje de intentarlo
marco tu número, pero suena ocupado
se está haciendo tarde, pero aun así tengo que esperar
para escuchar tus palabras susurrantes

Lo mágico de esta portentosa canción es que hasta las palabras escogidas por Jay- Jay no son poesía rebuscada, las podría decir cualquiera, esa es su magia especial. Y la historia no es más que una más de las tantas que encantan a este bizarro músico, emblema de los perdedores crónicos. La forma en que es expresado es lo que hace a la canción algo memorable.

Porque entendemos ese sentir deprimente del que Jay-Jay Johanson ha hecho su carrera: el tipo incapaz de dominar su interacción con el mundo, un zero, el outsider solitario en su habitación, sucumbiendo ante su lastimosa melancolía. En ese vaivén, posiblemente hasta la mujer de Jay-Jay ni existe.

También lee: 5 buenos discos de 2022 que deben estar en tu colección

El tema nos hace imaginar ese baile romántico, que el mismo autor desearía, esa noche, escuchar las palabras de la chica y bailar con ella. Es en verdad inspirador.

Si tomaras el teléfono te diría
las palabras más bellas que me sé
si respondieras ahora, te las diría
una y otra vez

Y eso es todo. El tema viene, ocurre y luego se desvanece con su sentir perpetuo y lleno del misterio de la noche. En un disco que parece creado para escucharse en la noche.

Escucha aquí la hermosa Whispering Words de Jay-Jay Johanson:

Por Jesús Serrano Aldape

Jesús Serrano Aldape es escritor y periodista, graduado de la UNAM, licenciado en Ciencias de la Comunicación, se tituló con una tesis sobre el Universo Trágico de David Bowie. Le gustan la música, el cine y los videojuegos, el teatro, los deportes y la política, temas de los cuales ha escrito durante 20 años en publicaciones como Trasfondo, Milenio, Replicante, La Mosca en la Pared, entre otras.