Culpas y baches

El insensible e indiferente Transacude

Para excusarse, los políticos y funcionarios mediocres son expertos. Son magistrales productores creativos de excusas y pretextos: «No hay dinero», «Ya estoy cansado», «Di positivo a Covid», «La culpa es de AMLO» y similares.

AMLO y el gobierno federal, sin necesidad de seguir endeudando al país, han emprendido con éxito grandes proyectos de nación, vacunación nacional exitosa contra el Covid, fortalecimiento de los sistemas de salud, entre otras valientes y firmes decisiones, a pesar de la oposición pedorra y sus inválidos, decrépitos y guangos intentos de evitarlo.

Es decir, NO HAY EXCUSAS NI PRETEXTOS VÁLIDOS. La Ciudad Capital de Uajacalifornia, y la entidad en general, han padecido los últimos años más severos de engaños, maquillaje mediático y abandono de los dos gobiernos municipales anteriores, el actual y el estatal. Muchos otros gobiernos municipales anteriores y actuales, al interior del estado, también tienen a sus pueblos en la inmundicia, la zozobra, la miseria, con los niveles más bajos de calidad de vida y la peor infraestructura pública de la historia.

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Una de las excusas más utilizadas los últimos años es la de «Todas las crisis las provocó la pandemia», pero es, justamente, sólo eso, una excusa cínica, pues no hay para pavimentar calles ni reparar semáforos, pero sí para malgastar millones en un banquete para el gober y sus invitados en la Noche Mexicana, para la Transaguetza, pagar sus espectáculos musicales y hospedaje y comida gratis para invitados «de honor», para desfiles de moda internacionales en un hotel de lujo (propiedad de un político/empresario priista-panista-moreno) en el que un desayuno (personal) anda, en promedio, en los 2 mil pesos con, para colmo, ropa plagiada de textiles de pueblos originarios y Mamaluma presentando una marca de mezcal «de su propiedad», entre otras calamidades.

Las pocas sobras públicas y adquisición de bienes y contratación de servicios públicos, en el caso de la Ciudad Capital de Uajacalifornia, no avanzan porque Martirios Neri, el presidente municipal, un priista disfrazado de morenista, se empeña en perseguir, amenazar, acosar, hostigar y extorsionar a los empresarios acreedores.