Ante el recrudecimiento de la inseguridad en la Noria, barrio tradicional en Oaxaca de Juárez, doña Laurita, vigila las calles con machete en mano.
Doña Laura Estela Hernández cuando optó por vigilar su barrio lo hacía sólo con un silbato, pero conforme aumentó la delincuencia optó portar el arma blanca, el machete.
Doña Laurita ni durante el pico más alto de la pandemia por COVID-19 ha dejado, ni dejará de vigilar las calles, a pesar de que considera que es una obligación de las autoridades, proporcionar este servicio, lo anterior lo declaró para Citlali López, de La Silla Rota.
“La inseguridad es terrible, apenas asaltaron a una vecina en la tercera con Carbonera cerca de la escuela Porfirio Díaz, Iba en “una moto y le quitaron su bolsa y celular”, subrayó doña Laurita.
Manifestó que los robos han aumento, debido al abandono de las autoridades excusados en la pandemia.
“El crecimiento de la inseguridad es por la pandemia, es porque estamos en el abandono, no hay recorridos, no hay movimiento de policías como ahora que les llamé y nunca llegaron”, señaló.
Detalló que siempre que se llama a la policía para atender un auxilio o emergencia nunca llegan, ni para tomar las fotos del suceso.
Por lo que desde hace día ha optado por llevar machete en mano y está decidida que si se encuentra a una persona robando, le meterá un machetazo “porque ya me tienen hasta el gorro”.
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La señora señaló que cada vez aumentan más lo robos en la zona por la falta de presencia de policías.
Recalcó que nada beneficia que los policías estén en el zócalo, ya que las calles están en el pleno abandono en cuestión de seguridad, “no hay autoridad”.