Como avalancha se vinieron los problemas a Grupo “R”, del empresario Ramiro Garza Cantú por el embargo de créditos que le aplicó el Sistema de Administración Tributaria (SAT). En paralelo, su contrato con Petróleos Mexicanos (Pemex) se tambalea, luego de que su barco grúa prácticamente saliera de operaciones.
De ese barco insignia del Grupo “R”, el GARZPROM 2, la empresa decidió bajar a 70 trabajadores para los cuales no hay recursos ni para alimentos o salarios, luego de que le fuera notificado de su cartera de créditos.
De acuerdo al contrato 648238800 con Pemex, esa nave presta apoyo para el desarrollo de trabajos de instalación de infraestructura, montaje de equipos, rehabilitación y mantenimiento de estructuras, interconexión de líneas de proceso, obra electromecánica y de seguridad en los centros de proceso y plataformas satélites en aguas mexicanas”.
El GARZPROM, que opera desde 2008 para Pemex, fue concebido en astilleros rusos como un barco para realizar trabajos de perforación
El GARZPROM, que opera desde 2008 para Pemex, fue concebido en astilleros rusos como un barco para realizar trabajos de perforación en el Mar del Norte, pero en México fue modificado como grúa.
Desde aquel año, nunca han faltado los contratos para Grupo “R” y hasta se ha beneficiado de contratos que dejó inconclusos la tristemente célebre Oceanografia, propiedad de Amado Yáñez Osuna.
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Los problemas para Grupo “R” comenzaron cuando decidió incursionar en el ramo de las plataformas marítimas en aguas profundas. Se hicieron de la Bicentenario, La Muralla 4 y, después, de las auto elevables Cantarell 1, 2, 3 y 4.
El negocio en el Pemex de aquellos años pintaba muy alentador para Grupo “R”, pero luego vinieron las complicaciones operativas que después dieron paso a las económicas y fiscales.