El exlíder del extinto Cártel de Guadalajara, Rafael Caro Quintero, preso en el penal del Altiplano, recurrió a la protección de la justicia; interpuso un juicio de amparo ante un juez del Estado de México, mismo que le otorgó una suspensión ante los supuestos actos de tortura de que es víctima en la cárcel.
En esta se señala que sufre actos de incomunicación, segregación, aislamiento, cautiverio con tormentos físicos y psicológicos; así como malos tratos, abuso de autoridad, tortura y lesiones que ponen en riesgo su vida.
Esto por parte de las autoridades del Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) del Altiplano.
Cabe señalar que el pasado 17 de julio, después de 9 años de haberlo liberado, fue detenido en el municipio de San Simón (Choix), Sinaloa por la Secretaría de Marina.
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El juzgador dio un plazo no mayor a 24 horas a las autoridades del Cefereso número 1 «Altiplano», con sede en Almoloya de Juárez, Estado de México, para dar cumplimiento a esta determinación, apercibidas que si al rendir su informe correspondiente afirmaren una falsedad o negaren la verdad, podrían incurrir en el delito previsto en el artículo 262, fracción III, de la ley de la materia.